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Cumbres de ensueño.
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No. Catálogo Nautilo 657428
Título: Cumbres de ensueño.
Datos de la publicación: México, D.F. :Editorial Juventud,1941-1948.
Números en existencia de la HNM: No. 728 (19 marzo 1941)-no. 3319 (20 abril 1948).
Publicado en: Pepín.
Argumentista: Guillermo Marín.
Gráfica: Guillermo Marín.
Género: Melodrama.
Técnica: Línea.

Variante temática:
Romance
Intrigas pasionales

Descripción: Guillermo Marín es uno de los pilares del "Pepín" de principios de los años cuarenta; los otros dos son José G. Cruz y Gabriel Vargas, a los que pronto se suman Antonio Gutiérrez, Carlos del Paso y Yolanda Vargas Dulché. Además de ser una de las piezas estelares de la revista, su historieta emblemática "Cumbres de ensueño" es una de las primeras series exitosas del melodrama romántico, y en este sentido marca el rumbo de unas vertientes principales de la historieta mexicana. Antes de ella, muchas series del género de aventuras ya habían pulsado las fibras sentimentales de los lectores, pero la pasión amorosa no era el eje de la trama, como sucede en esta serie de Guillermo Marín, donde la aventura íntima sustituye por completo a la exterior. "Cumbres de ensueño" está formada por una larga serie de episodios independientes, protagonizados por distintos personajes que se desarrollan en diversos ambientes. Se trata de medianas y pequeñas historietas autoconclusivas, siempre vinculadas por un estilo, un tema (el amor) y un autor (Guillermo Marín). Como reza uno de sus primeros anuncios: "Al corazón no se le manda, sigue siempre sus impulsos ciegos, pero generosos, llegando en muchas ocasiones hasta el sacrificio... por eso... "Cumbres de ensueño" llegará al corazón de todos los lectores de "Pepín". La serie se concibe a sí misma como una sección de la revista, que incluye, además de las historias: cartas de lectores, concursos, un álbum romántico de poesía y un buzón sentimental que resulta muy interesante, pues pese a estar concebido para el intercambio de mensajes amorosos, pronto se convierte en una columna de servicio social. A ella acuden gran cantidad de lectores en busca de parientes perdidos con misivas como la siguiente: "El señor Teofilo Galván, de Ciudad Mante, Tamaulipas, nos dice que desde 1935 no ve a su mamá, la señora Rafaela Galván, y a sus hermanas María, Consuelo y Guadalupe Galván, cuando salieron de Querétaro rumbo a la ciudad de México." La abundancia de cartas de este tipo, cuya publicación muchas veces se hacía acompañar con las fotografías de los desaparecidos, da cuenta de un país en diáspora, donde la migración del campo a las ciudades y la movilidad son constantes. El primer capítulo de la serie se inicia cuando un par de amigas, Elisa e Isabel, nadan en el mar. Cuando Elisa es revolcada por una ola, aparece el apuesto Renato y la salva de las aguas turbulentas, pero quien aprovecha la situación y se marcha con el galán es Isabel, dejando atónita a Elisa. Las historias desarrolladas en la serie se ambientan en diversos lugares: París, la Alemania nazi o las residencias de la capital mexicana y vecindades que la circundan. Quizá algunos de los capítulos más característicos del tono y las situaciones que narra "Cumbres de Ensueño" a lo largo de sus casi siete años de aparición sean los publicados en septiembre de 1944: Jorge, "un capitalino en vacaciones" llega al campo para seducir a la inocente Marcela y dejarla embarazada. Con el hijo a cuestas, la joven marchará a la capital en busca del padre de su hijo y será hostigada por ser pobre y por ser mujer, además de atractiva. "Era el egoísmo, la envidia, todo contra ella sola y su desvalido hijo... sólo los hombres la miraban con el deseo encendido en sus pupilas". En este caso, el melodrama puramente romántico deviene en melodrama social. El ejemplo cundirá en la historieta mexicana del género que, además de explotar los sufrimientos del corazón, abundará en la desventura social de los personajes...
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